jueves, 11 de junio de 2009
martes, 9 de junio de 2009
centrífugo y su antonimo (se borró del brazo)
lunes, 8 de junio de 2009
blanca danza
llegaron los indios cargando una canoa, el ambiente cargado y místico, en la canoa mi padre o su representante, alrededor mas indígenas como presenciando el ritual, formando parte. en el pecho de mi padre habia fuego, quemaba desde su pecho hasta su garganta, parecia que estabamos sacrificando a mi padre, yo estaba alli presenciandolo, como si debiera ser así, (me abarcaba un sentimiento tan atrofiador, tan de cadaver..) luego al empezar otra canción de mas baja intensidad, sentí su transición, se lleno de blanco el lugar, su ser y el espacio que ocupaba, no fisicamente, era un blanco independiente del color, de la materia,....y de blanco decidi dedicarle la ultima danza.
sábado, 6 de junio de 2009
somos hermosas ecepciones
planeta de muchacho
y jovensita elefanta
se saben lindos de repente
montados (claro) sobre lineas de pensamientos con escarcha.
hermosas ecepciones ellos son
no llegan a componer un lugar por mas de 3 cajas repletas de minutos impares,
que eso vendria a ser equivalente a 27 guiñadas entre ellos y 5 chocadas de barbilla.
quisieran (aveces los dos, y otras uno solo) sobrepasar tal estadistica,
pero entre ellos caen abruptas rampitas como parte de una lluvia interesante
independientemente de los fuegos artificiales que se inspiran y comparten.
ocasionalmente son perfectas las rutas que recorren de los parpados hacia dentro,
alimentan sus flotadores a un nivel elevado,
pero siempre, siempre, sale a relucir su falta de raíz (luego de esas 3 cajas).
de que estan llenos esos minutos que llenan a su vez la caja que se dedica a hacer sentir la presencia del hueco existente?
cuando el aprietas sus dientes
y trata de que sus labios se flexionen hasta tocar sus orejas
a ella le duelen la tres cajas,
porque el ritual de la sonrisa de el causa incendios en los hormigueros de panza de ella, esto provocando que las hormigas le peguen a hablar trinitariano
ello impulsandole a palparle los cachetes del planeta de muchacho de todas las formas habidas y por haber,
hasta que las tres cajas, las tres cajas con sus tres bocas dicen "PEEEEEERO" repetidas veces implorando bomberos, requiriendo mangueras, apagandole poco a poco en todas sus puertas.